Si tú también crees que el amor no entiende de especies y que un mundo mejor sólo es posible si las cosas se hacen con corazón, éste es tu lugar.

No soy fotógrafa de mascotas, sino de animales. No sé porque no me gusta este término. Suena como si de un juguete se tratara. Y para mí ellos son iguales a nosotros y forman parte de mi familia. La única diferencia es que se comunican solamente desde el corazón y viven el presente sin prejuicios ni mentiras.

 

Como nosotros, tienen su propia personalidad, energías diferentes, días buenos y malos.  Hay cosas que les gustan un montón y otras que no tanto, se enamoran, se ponen tristes... Estos detalles que los distinguen y el vínculo especial que tienen contigo, es lo que quiero que quede reflejado en mis fotografías.

 

Para conseguirlo, personalizo las sesiones en función del carácter de cada animal, ya que todos son diferentes. La consulta previa me sirve para conoceros y decidir qué lugar y formato de la sesión es adecuado para tu amigo. Su bienestar es para mí lo más importante y por eso me adapto a las necesidades de cada uno.

 

A veces ocurre que el animal no se siente cómodo y no quiere que le hagan fotos o que se le acerque una persona extraña. Ellos no te lo pueden decir con palabras, pero sí te lo hacen saber con su actitud y lenguaje corporal que se ha de respetar. Veo muchas fotografías "bonitas" por ahí con miradas asustadas, animales estresados, incluso con dolor y me pregunto ¿cuál es el precio de una fotografía?

En mis sesiones predomina la paciencia y es lo que también te pido a ti. Los animales,

al igual que los niños, son quienes marcan el ritmo. Paramos cuando están cansados y jugamos si lo que necesitan es descargar energía. Es mi responsabilidad que se sientan cómodos delante del objetivo y lo que más me ayuda a conseguirlo es la calma, las chuches y el conocimiento sobre el comportamiento animal.

 

En casos extremos de miedo y/o agresividad te recomiendo antes de fotografiarlos hacer sesiones de modificación de conducta. Te servirán no solamente para poder hacerles fotos, sino además para facilitar vuestra convivencia del día a día. La verdad es que con paciencia y dedicación se pueden conseguir verdaderos milagros. ¡Vale mucho la pena!

Si no conoces a nadie que te pueda echar una mano, yo misma te aconsejaré unos profesionales que se especializan en comportamiento canino, felino o equino.

 

Porque no hay nada mejor que un animal feliz. Y sé cómo de importante es para ti. Seguro que como los míos, forma parte de tu familia. ¿No te gustaría tener un recuerdo bonito para toda la vida? Gracias a las fotografías de los que me han dejado por el camino, puedo todavía apreciar sus miradas y expresiones típicas. La huella que han dejado parece más viva y llena mi corazón de alegría y gratitud cada vez que las miro. Así me aseguro que no los olvidaré nunca.

¿Te animas a congelar conmigo el carácter único de tu amigo de una manera divertida y sencilla?

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GIVING BACK

Tanto los animales como la naturaleza forman una gran parte de mi vida. Por el respeto a ambos, quiero devolverles lo que me están dando todos los días también a través de mi trabajo.

Colaboro con la revista "Horse Evolution" y "Asociación Defensa Équidos" (ADE), con un proyecto "Finales felices", para crear consciencia sobre el maltrato y fomentar la adopción de caballos abandonados.

Si dispones de un contrato de adopción (sea caballo o no) te regalo un descuento de 20€ en cualquier sesión que elijas.

Además una parte de los beneficios va destinada a ayudar a aquellos animales que no han tenido tanta suerte, como los nuestros.

 

FINALES FELICES

Porque los animales no humanos son los que humanizan al hombre.

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